Porque quiero ser revolucionaria de mi propia vida...

domingo, 2 de marzo de 2014

Yo sólo quería saber
si todas esas cosas que se sienten, pero no se cuentan, 
van algún día a parar a algún invernadero dónde florecen,
lejos, 
todas esas intenciones enterradas en nuestras más profundas raíces.
Y poder visitar cada equis tiempo nuestra propia planta para comprobar si crecimos ahí dentro. 
Sin llovernos, ni regarnos de un viento recíproco.
Si fue lo suficientemente fuerte esa energía que se ata a las casualidades, e hizo algo, en algún lugar del mundo, 
por nosotros.
Y olerte, entonces,
como la primera vez.


*